jueves, 18 de diciembre de 2014

La Relación de Pareja y su Gran Desafío


Cuál sería la pareja ideal o el  compañero que nos ayudará a recorrer el camino?

Cómo detectar si la persona elegida ha sido la correcta? Cómo darnos cuenta  lo que llamamos en el argot popular que hemos encontrado  “la otra mitad” o “la media naranja.”?

Cuando se camina  con un objetivo en común, disfrutando y admirando   las actividades de cada uno, los  deseos mutuos, acontecimientos, aspiraciones, anhelos, acciones, y también cuando ayudas para que tu pareja pueda crecer y realizarse en la vida, si existen estos elementos entre las dos personas acompañados del  respeto y admiración, pienso que estamos caminando  con la persona correcta.

Si estos  elementos no existen en una relación, posiblemente hayamos elegido  la persona equivocada.
Saber vivir  en pareja es un desafío diario,   es una gran  tarea que no se debe descuidar, desde  el momento que uno de los dos se despreocupa de estos factores, posiblemente se verán obligados a enfrentarse a futuros  conflictos,  producto de una relación insatisfecha.

Estudios realizados han demostrados que las parejas que viven saludablemente  tienen una mejor calidad de  vida, mientras que las que no logran vivir sanamente viven continuamente amenazados por   problemas de salud, como depresión, dolores crónicos, enfermedades inmunológicas.

Debido a esto es preciso que se deba  establecer  un limpio y amplio diálogo para poder mantener un equilibrio en la relación, esta conexión producirá que se logre conocer las inquietudes y vivencias de cada uno,   todo esto debe ser respetado de ambas partes. El mantenerse comunicados  será fundamental para así poder conocer sus anhelos, propósitos, y objetivos en la vida.

Recordemos que nunca la violencia verbal o física será la mejor herramienta para  resolver un problema de pareja.
Actualmente la forma de vida debilita el lazo familiar, el cuidado de los hijos, las responsabilidades en el trabajo, situación económica,   la alienación actual que estamos viviendo,  rompe la comunicación, produciéndose inconscientemente  una barrera que a la larga termina apagando  el vínculo que se ha establecido.

Todos estos hechos  producen  incontables desajustes, no sólo en la relación,   sino también en las personas que forman parte de ese entorno familiar.
Los conflictos dan como resultado una vida sin calidad a sus hijos,  quienes  posiblemente vivirán cuando  sean adultos  problemas de comportamiento  y dificultad para realizarse en su vida de pareja.

Después de la etapa del enamoramiento que es la más sublime viene la verdadera realidad, porque en el enamoramiento se alberga la emoción, sexo, pasión, pero cuando esto pasa,   nos encontramos  cara a cara con la verdad, es ahí cuando viene la otra etapa,   donde  todo eso empieza a mermar, entonces  nos queda lo esencial, esto  implica hacernos la vida más agradable con los elementos más importantes de cada uno.

La intimidad se debe reafirmar siempre, la complicidad del uno con el otro es fundamental, pero  no debemos dejar de ser  seres libres con nuestras propias vivencias, respetando  siempre  el  espacio de cada persona.

Qué sucede cuando estos factores empiezan a desaparecer?  se desencadena una serie de conflictos, que afectan la intimidad, ya no hay reciprocidad, las  expectativas como pareja empiezan a desaparecer,   la relación comienza a sumergirse, en algunos casos  no quieren separarse,  el dolor que produce el desapego muchas veces es difícil de manejar, y es entonces cuando  se emprende la búsqueda a la  solución del  conflicto,  buscando a profesionales para recibir terapia y así poder recuperar lo perdido, retomar el espacio que sin querer se fue descuidando,    en muchas ocasiones es un proceso desgastante que se produce  demasiado tarde.

Lo importante es no llegar a ese extremo, hay que aprender a vivir en pareja la tarea no es fácil, pero tampoco difícil.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario